Un niño de Leganés olvidado en el bus escolar

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En un triste incidente que tuvo lugar el 11 de septiembre en Madrid, un niño de 11 años con trastorno del espectro autista, llamado Leo, fue olvidado en un microbús escolar y luego encontrado desorientado y deambulando a 10 kilómetros de su colegio.

Este alarmante episodio de negligencia ha sacado a la luz la necesidad de una supervisión más rigurosa y una mayor conciencia sobre las necesidades de los niños con discapacidades en el sistema de transporte escolar.

El Día que Leo Quedó Olvidado

Como en cualquier otro día escolar, el lunes 11 de septiembre, Leo se subió al microbús escolar cerca del Hospital Severo Ochoa de Leganés a las 9:35 de la mañana. Su destino era el Centro de Educación Especial Alfonso X el Sabio, también en Leganés y cercano a Cerrajería Barcelona.

Sin embargo, este día en particular, Leo se quedó dormido en el último asiento del autobús, y nadie se percató de su presencia cuando llegaron al destino. Ni la conductora, ni la monitora, ni el colegio notaron su ausencia.

Este descuido resultó en una situación aterradora para Leo. El microbús, tras haber completado su ruta, terminó estacionado en las cocheras de la empresa de transportes Puesta del Sol en Alcorcón, con Leo aún dentro.

Sorprendentemente, nadie verificó el interior del vehículo en ese momento, lo que significa que el niño estuvo encerrado en el autobús durante horas sin que nadie lo notara.

Un niño de Leganés olvidado en el bus escolar

El Despertar de Leo y su llamado de Auxilio

Leo toma medicación que le provoca somnolencia, y cuando finalmente despertó en un lugar desconocido y se dio cuenta de que estaba completamente solo, empezó a tocar el claxon del autobús.

Este acto desesperado fue su intento de pedir ayuda y señalar su presencia a cualquier persona cercana. La persona que respondió a esta llamada, posiblemente un trabajador de la empresa de transportes, abrió la puerta del autobús.

Sin embargo, su respuesta dejó mucho que desear, ya que, según la madre de Leo, Paula, esta persona «ni siquiera preguntó a mi hijo si estaba perdido o necesitaba ayuda». Simplemente le comunicó que iba a llamar a la policía y se fue, dejando al niño solo.

El Comienzo de una Peripecia Peligrosa

A partir de ese momento, Leo se encontró en una situación potencialmente peligrosa. Detrás de las cocheras donde se encontraba el autobús, se encontraba la autopista R-5, y al otro lado, una estación de tratamiento de residuos.

Sin embargo, Leo decidió caminar en busca de ayuda. Caminó aproximadamente dos kilómetros hasta llegar a las puertas de un supermercado Aldi, donde pidió a una trabajadora que le permitiera usar el baño.

La trabajadora del supermercado, al darse cuenta de que algo no estaba bien, decidió tomar medidas y contactó a la policía local de Alcorcón.

Esto marcó un punto de inflexión en la situación de Leo. Finalmente, la policía local se puso en contacto con su padre y le informó que su hijo había sido encontrado «deambulando y desorientado en la calle».

Reacción de las Autoridades y la Comunidad Educativa

La Consejería de Educación de la Comunidad de Madrid anunció de inmediato que abrirá un expediente tanto al centro educativo como a la empresa de transportes para investigar a fondo lo sucedido y determinar las responsabilidades.

El consejero de Educación, Emilio Viciana, enfatizó la importancia de esclarecer los hechos y de tomar medidas para evitar que incidentes similares vuelvan a ocurrir en el futuro.

La madre de Leo, Paula, insistió en que tanto la monitora como la conductora conocen los efectos de la medicación que toma el niño y deberían haber sido más conscientes de su situación.

Este incidente ha llevado a reflexionar sobre la necesidad de una formación adecuada y una mayor conciencia sobre las necesidades de los niños con discapacidades en el sistema de transporte escolar.